En el más reciente episodio de «El Fin del Dinero», el director de Chócale, Maximiliano Valdés, profundizó en el notable aumento de la oferta de seguros para mascotas en Chile. Desde el 2021, el sector ha experimentado un crecimiento exponencial, pasando de apenas tres compañías que ofrecían este servicio a más de quince en la actualidad. Esto refleja un cambio en la percepción de los dueños hacia sus mascotas, quienes ya no son vistos como simples animales, sino como miembros integrales de la familia. Valdés destacó que un sorprendente 87% de los dueños está preocupado por la salud y el bienestar de sus mascotas, y un 76% siente aflicción cuando estos sufren, lo que ha impulsado la creciente demanda de seguros que cubran desde emergencias veterinarias hasta servicios de bienestar como paseos caninos y limpieza dental.
El auge de estos seguros no solo responde a la emotividad y responsabilidad hacia las mascotas, sino también a la diversificación de coberturas que ofrecen estas plataformas. Los seguros para mascotas ahora incluyen atención médica preventiva, tratamientos para enfermedades crónicas y seguros de responsabilidad civil para daños a terceros, con algunas pólizas que ofrecen topes de hasta 500 UF. Este crecimiento también puede interpretarse como una respuesta a la urbanización y cambios en los estilos de vida, donde tener una mascota implica costos asociados que los dueños desean cubrir. Valdés enfatizó que la salud y el bienestar de las mascotas se han convertido en prioridades para muchos chilenos, destacando que la inversión en seguros puede ser vista como una medida de prevención esencial.
Luego de discutir el fenómeno de los seguros para mascotas, Valdés giró la conversación hacia un tema que ha comenzado a captar la atención en la esfera social: la «Friendflation». Este término describe cómo los padecimientos económicos, como el incremento en el costo de vida, están llevando a las personas a incurrir en gastos más allá de sus posibilidades para mantener y fomentar amistades. Por ejemplo, las reuniones sociales, celebraciones y salidas con amigos a menudo obligan a los individuos a comprometer su estabilidad financiera en pos de encajar en entornos que valoran el gasto como un indicativo de estatus.
Valdés explicó que este fenómeno impacta profundamente el presupuesto familiar, especialmente en un contexto donde muchos chilenos ya se encuentran lidiando con la inflación y el costo de bienes esenciales. La presión social para participar activamente en actividades grupales puede llevar a decisiones financieras cuestionables, donde priorizar la relación social sobre el ahorro puede resultar en un endeudamiento significativo. Los efectos de la «Friendflation» se sienten especialmente entre los jóvenes, quienes enfrentan la dificultad de equilibrar la vida social y la responsabilidad económica, a menudo resultando en un círculo vicioso de gastos no planificados.
En conclusión, la reflexión de Maximiliano Valdés en «El Fin del Dinero» deja en claro que tanto el crecimiento de los seguros para mascotas como el fenómeno de la «Friendflation» son indicadores de cambios en la estructura social y económica en Chile. Mientras que la protección de la salud de las mascotas se ha convertido en una prioridad fundamentada en el amor y la responsabilidad, las dinámicas sociales contemporáneas exigen una reevaluación de cómo los chilenos manejan sus finanzas en relación con sus relaciones personales. Este análisis invita a los oyentes y televidentes a considerar la importancia de establecer límites y prioridades en su vida financiera para enfrentar un panorama económico cada vez más desafiante.