Una emboscada violenta se desató la noche del miércoles en las inmediaciones del Estadio Libertadores de América en Avellaneda, donde al menos diez aficionados de Universidad de Chile resultaron heridos. Los hechos ocurrieron durante el encuentro de Copa Sudamericana, cuando barristas de Independiente atacaron a los hinchas chilenos. Las imágenes que circulan en las redes sociales revelan cómo estos últimos extrajeron diversos objetos contundentes desde una sala del recinto deportivo, incluyendo palos y fierros, con la intención de agredir a los seguidores del cuadro azul.
El video, que ha captado la atención de medios y redes sociales, se ha convertido en el centro de las acusaciones de organización premeditada entre los barristas. En él se puede observar cómo algunos hinchas de Independiente rompen vidrios para utilizarlos como armas improvisadas. La acción se llevó a cabo en la Tribuna Sur, convirtiéndose en el escenario de una brutal agresión, mientras que la policía argentina, encargada de garantizar la seguridad en el evento, no tomó ninguna intervención, lo cual ha suscitado un fuerte debate en torno a su protocolar actuación.
Las implicaciones de este ataque han llevado a críticas severas hacia las autoridades, incluido el ex titular de Seguridad de Argentina, Juan Manuel Lugones, quien no dudó en hablar de un «acuerdo» entre la barra de Independiente y las fuerzas del orden para permitir que los fanáticos actuaran sin restricciones. Lugones argumentó que lo ocurrido demuestra una falta de capacidad profesional por parte de la policía o una decisión deliberada de no actuar en la defensa de los aficionados chilenos, permitiendo que la violencia escalara a niveles inaceptables.
Ante la creciente presión mediática y pública, el gobierno argentino decidió tomar medidas drásticas, resultando en la clausura del Estadio Libertadores de América. Este cierre afecta el partido del domingo contra Platense, programado dentro de la Liga Profesional. La decisión busca enviar un mensaje contundente respecto a la intolerancia de la violencia en el deporte, aunque muchos se preguntan si esto será suficiente para modificar la cultura de violencia asociada a algunas hinchadas en el fútbol argentino.
Las redes sociales han jugado un papel crucial en la difusión de este incidente, con numerosas cuentas como Socios Unidos Independiente compartiendo el video del ataque, aunque posteriormente este fue eliminado. A pesar de ello, los registros han sido recuperados y continúan generando un intenso debate sobre la seguridad en los estadios y la responsabilidad de las autoridades. La situación ha resaltado la necesidad urgente de implementar mayores medidas de seguridad para prevenir que actos de violencia como estos se repitan, asegurando así un ambiente más seguro para todos los aficionados.
















