Un incidente alarmante tuvo lugar en el centro de Santiago, donde un hombre se encuentra en riesgo vital tras ser baleado por funcionarios de la Policía de Investigaciones (PDI). Según reporta BioBioChile, el suceso ocurrió en la madrugada de este lunes en la intersección de San Isidro con Marcoleta. Las primeras indagaciones apuntan a que el hombre lanzó un objeto contundente contra el vehículo de la PDI, provocando la respuesta armada de los policías.
El ataque al vehículo policial se produjo cuando los efectivos se encontraban dentro de su automóvil en la mencionada calle. Testigos indican que el hombre, en un aparente arrebato, lanzó un objeto que rompió uno de los vidrios del automóvil, lo que motivó la rápida acción de los funcionarios que, en un intento por disipar la amenaza, dispararon contra él. Esta reacción ha generado un debate sobre el uso de la fuerza por parte de las autoridades, especialmente en situaciones que puedan parecer de riesgo.
Tras recibir el impacto de los disparos, el lesionado fue trasladado de urgencia a la ex Posta Central, ubicada a pocas cuadras del lugar del incidente. En la actualidad, su estado es crítico, lo que ha encendido alarmas sobre la violencia en las calles de Santiago y los protocolos de actuación de las autoridades policiales. Al mismo tiempo, los organismos de salud han comenzado a monitorear su evolución, dada la gravedad de su condición.
Por otro lado, las autoridades han decidido abrir una investigación para esclarecer los detalles del hecho. El Grupo OS9 y el Laboratorio de Criminalística de Carabineros se están encargando de las pesquisas necesarias para determinar el contexto exacto que llevó a la herida del hombre. Este tipo de investigación es vital para asegurar la transparencia del actuar policial y para abordar posibles abusos en el uso de la fuerza.
El incidente ha sido objeto de atención mediática y ha resaltado la creciente preocupación de la sociedad respecto a la violencia y a las actuaciones de las fuerzas del orden. En medio de un contexto complicado, donde las manifestaciones y la tensión social son cada vez más frecuentes, este caso particular podría influir en futuros protocolos de actuación para la PDI y otras fuerzas del orden en el país.
















