El pasado lunes por la mañana, un hombre fue rescatado del río Mapocho en el centro de Santiago, después de que, según informó la policía, fue lanzado al agua por delincuentes que lo asaltaron. Este incidente ocurrió a la altura del Parque Forestal, un lugar frecuentemente transitado por ciudadanos y turistas, lo que ha encendido alarmas sobre la inseguridad que afecta la zona. La situación fue alertada por choferes del sistema de buses RED, quienes escucharon los gritos de auxilio del hombre y actuaron rápidamente para solicitar ayuda.
El hombre rescatado relató a los bomberos que había sido víctima de un asalto la noche anterior, cuando varios delincuentes lo interceptaron y, tras robarle sus pertenencias, lo arrojaron al lecho del río como parte de su huida. Este tipo de actos delictivos no son nuevos en Santiago, especialmente en áreas conocidas por su alta tasa de criminalidad. Testigos locales han manifestado preocupación por la falta de seguridad en la región, señalando que situaciones similares han ocurrido en el pasado.
Los choferes de los buses RED, quienes jugaron un papel crucial al rescatar al hombre, expusieron su inquietud sobre la peligrosidad de su trabajo en el área. Uno de ellos expresó que es común que tengan que mantener las puertas cerradas en los vehículos, debido a los constantes robos y asaltos en la zona. Dijo: «Este sector es bien malo. Cuando llegamos temprano, tenemos que estar con las puertas cerradas de los buses, si no te asaltan, te roban los celulares. Hay harto ‘pato malo'». Esta situación subraya la necesidad de mayor vigilancia y seguridad en la capital.
La frecuencia de estos incidentes ha llevado a las autoridades a intensificar la vigilancia en las calles y a implementar medidas preventivas en el transporte público. No obstante, los habitantes y trabajadores del área debaten si estas acciones son suficientes para disuadir a los delincuentes y garantizar la seguridad de todos. La necesidad de mejorar la iluminación y aumentar la presencia de carabineros en puntos críticos es cada vez más urgente para la comunidad.
El rescate del hombre, aunque resultó en un desenlace positivo con su salvación, refleja una problemática más profunda en Santiago: el aumento de la delincuencia y la inseguridad. Los ciudadanos exigen un cambio y una respuesta más contundente de las autoridades para proteger a quienes transitan por la ciudad, especialmente en sectores vulnerables como el Parque Forestal, donde los peligros no son solo de noche, sino también durante el día.
















