Martín de los Santos Lehmann, imputado por agredir a un conserje de 70 años en Vitacura, se encuentra en el centro de la controversia tras las recientes decisiones judiciales que han llevado a la emisión de una alerta internacional para su captura. Tras la declaración de prisión preventiva en su contra, el imputado ha decidido hablar públicamente sobre su situación desde Brasil, donde se encuentra actualmente, evadiendo las autoridades chilenas. Su caso ha captado la atención no solo por la gravedad de la acusación, sino también por las circunstancias que rodean su defensa legal.
En una entrevista con Chilevisión, de los Santos expresó su profundo descontento con el sistema judicial que le impide acceder a un abogado debido a su ausencia en el país. «Yo la verdad estoy bien afectado porque me acaban de informar mis abogados que no se pueden patrocinar, porque el sistema bloqueó para que yo no pueda tener defensa», afirmó. A pesar de la seriedad de los cargos en su contra, de los Santos sostiene que su principal objetivo es salvaguardar sus derechos y apelar la decisión de prisión preventiva.
La situación de Martín de los Santos se complica aún más por la renuncia de su defensa anterior, que ha dejado un vacío legal difícil de llenar en el corto plazo. Según menciona, el sistema judicial le exige presentar un nuevo abogado de manera presencial, lo que le impide actuar desde Brasil, donde se encuentra eludido de la justicia chilena. Este factor ha generado dudas sobre su capacidad para llevar a cabo una defensa efectiva, lo cual podría influir en el desarrollo futuro del caso.
A medida que comienza el proceso de apelación, de los Santos ha sido claro en señalar la urgencia de contar con un representante legal adecuado. «Necesito un abogado privado urgente», enfatizó, destacando la presión del tiempo debido al plazo limitado para presentar su apelación, establecido hasta el próximo sábado. Esta situación ha exacerbado la percepción pública sobre cómo los derechos de los imputados son gestionados por el sistema judicial, especialmente en casos de alto perfil.
La controversia en torno a Martín de los Santos Lehmann no solo pone de manifiesto los desafíos que enfrentan los imputados en situaciones de conflicto legal, sino que también abre un debate más amplio sobre la eficacia del sistema judicial en Chile. La incapacidad del imputado para obtener defensa adecuada provoca inquietudes sobre la protección de los derechos individuales y la posibilidad de un juicio justo, a la vez que invita a cuestionamientos sobre cómo se manejan casos que involucran a figuras públicas y las implicaciones que pueden tener en la opinión pública.
















