El atractivo de «ganar dinero de manera rápida y sin riesgos» ha llevado a un aumento alarmante de estafas y cibercrimen en el ámbito de las criptomonedas. Desde su aparición en el mercado a finales de la década de 2000, las criptomonedas han evolucionado de ser vistas con escepticismo a convertirse en una opción popular de inversión. Sin embargo, esta popularidad también ha atraído a estafadores que buscan aprovecharse de la inexperiencia de los nuevos inversores. Las criptoestafas, que pueden incluir desde esquemas Ponzi hasta el phishing, están en auge, lo que ha llevado a las autoridades a emitir advertencias y recomendaciones para proteger a los consumidores de estas tácticas engañosas.
Para evitar caer en la trampa de una estafa con criptomonedas, la Comisión Federal de Comercio de Estados Unidos ha elaborado una serie de consejos prácticos que todos los inversores deben considerar. En primer lugar, es fundamental desconfiar de las promesas de altas ganancias garantizadas. Aunque la idea de obtener rendimientos rápidos y fáciles resulta seductora, la realidad es que todas las inversiones conllevan riesgos y están sujetas a la volatilidad de los mercados. Por ejemplo, el Bitcoin, la criptomoneda más conocida, ha experimentado caídas significativas en su valor, lo que demuestra que el mercado no es tan predecible como algunos podrían querer hacernos creer.
Otro consejo crucial es prestar atención a las solicitudes de pago en criptomonedas. Los negocios legítimos no exigen pagos anticipados exclusivamente en criptomonedas. Si te encuentras con una empresa que solo acepta este tipo de pago, es un claro indicativo de que podrías estar frente a una estafa. Este tipo de tácticas engañosas son comunes y muchas veces se disfrazan de oportunidades de inversión legítimas. Es esencial investigar y verificar la autenticidad de cualquier empresa antes de realizar transacciones.
Además, las invitaciones a invertir en nuevas criptomonedas también son un foco de atención para los estafadores. A menudo, estas oportunidades son promovidas por individuos que se presentan como expertos en el tema y que prometen ganancias rápidas. Este enfoque es similar a las estafas piramidales, donde la clave para mantener el esquema es atraer a más personas. Si bien algunas nuevas criptomonedas pueden ser legítimas, es fundamental realizar una investigación exhaustiva y ser cauteloso antes de invertir en algo que parece demasiado bueno para ser verdad.
Por otro lado, la compra segura de criptomonedas puede ser facilitada por la regulación que están implementando varios países. En el caso específico de Chile, por ejemplo, el Servicio de Impuestos Internos ha comenzado a regular las transacciones de criptomonedas desde 2018, y la reciente Ley Fintec de 2022 ha establecido un marco más claro para el uso de tecnologías financieras. Con entidades como FinteChile apoyando la transparencia y la seguridad, los inversores ahora pueden acceder a plataformas más confiables como Buda y Cryptomarket. Sin embargo, siempre es recomendable verificar la reputación de cualquier plataforma y buscar reseñas y quejas en línea antes de realizar cualquier inversión.