El ministro de Agricultura, Esteban Valenzuela, ha declarado en una entrevista con El Diario de Cooperativa que los recientes incendios forestales en la Región de La Araucanía presentan una clara intencionalidad. Según Valenzuela, las zonas de Arauco y Malleco han sido las más afectadas, mostrando un nivel de intencionalidad que supera la media habitual. Esta afirmación ha llevado a las autoridades a iniciar investigaciones para identificar a los responsables de estos siniestros, que han causado preocupaciones significativas entre la población local y han puesto en alerta a los organismos de emergencia.
Hasta el último informe de este martes, se contabilizaban entre 15 y 16 incendios activos en la región, lo que ha llevado al ministro a confirmar que ya se han emitido varias órdenes de investigación. Valenzuela enfatizó la importancia de actuar con celeridad y eficacia ante esta situación, dada la gravedad de los incendios y su impacto en la comunidad y en el medio ambiente. La colaboración entre distintas instituciones será clave para abordar este problema y prevenir futuros incidentes.
En relación a las medidas de control implementadas, Valenzuela realizó un balance positivo sobre el toque de queda establecido en la región. El ministro afirmó que esta medida ha facilitado el tránsito y el trabajo de los equipos de emergencia, contribuyendo a la lucha contra el fuego. «El toque de queda ayuda. Sin lugar a dudas que tiene efecto», señaló, resaltando que con esta restricción se logra una mayor trazabilidad y un aumento en el patrullaje, lo cual es fundamental para mantener la seguridad y el orden público en las áreas afectadas.
El lunes por la noche, el ministro Valenzuela también anunció la declaración de estado de emergencia agrícola en las zonas más impactadas por los incendios. A partir del viernes o sábado, se comenzarán a entregar ayudas inmediatas a los afectados, que incluirán la entrega de alimentos. Esta respuesta rápida busca mitigar los efectos inmediatos de la crisis y brindar apoyo a las comunidades que enfrentan dificultades debido a la situación actual.
En cuanto al impacto en la producción agrícola, Valenzuela comentó que los sectores más perjudicados han sido el trigo y el turismo, especialmente por el cierre de parques forestales como medida preventiva. Sin embargo, el ministro destacó que, si se logra controlar los incendios con la rapidez actual, las afectaciones podrían catalogarse como «acotadas». Con un 40% menos de hectáreas quemadas en comparación con el año anterior y un incremento del 8% en el número de incendios, Valenzuela concluyó subrayando el compromiso del Gobierno, que ha destinado más de 160 mil millones de pesos para combatir estos siniestros, además de los 140 millones provenientes del sector privado.