La ciudad de Puebla enfrenta un grave problema de degradación ambiental, y uno de los focos más preocupantes es la laguna ubicada en la Ciudad Universitaria de la BUAP. Con más del 80 por ciento de los cuerpos de agua de la región sumidos en la mancha urbana o contaminados, esta laguna se erige como uno de los pocos remanentes acuíferos que aún preservan biodiversidad. Reconocida como un refugio para diversas especies de flora y fauna, muchas de ellas nativas, se convierte en un espacio fundamental no solo para la recreación, sino también para investigaciones académicas en áreas como Biología y Ecología.
Conscientes de la necesidad de restaurar este ecosistema vulnerable, la BUAP ha lanzado el proyecto denominado «Restauración Sustentable de Ecosistemas en Laguna de CU y su Área Verde». Esta iniciativa, liderada por la Secretaría Administrativa y la Coordinación General de Desarrollo Sustentable, busca no solo rehabilitar la laguna, sino también mejorar su entorno inmediato, contribuyendo así a la calidad ambiental y la promoción de la biodiversidad. El proyecto está diseñado en varias etapas, comenzando con un urgente trabajo de desazolve.
En la primera fase, que ya ha comenzado, se han retirado 266 metros cúbicos de sedimentos, lodos y materia orgánica, con el objetivo de aumentar la capacidad de captación de agua durante la temporada de lluvias. Este trabajo no solo es vital para la salud del cuerpo de agua, sino que también marca un primer paso en la recuperación del ecosistema circundante. Las labores de limpieza continuarán con acciones adicionales, incluyendo la poda de árboles afectados por plagas y la mejora de los sistemas de aireación del lago.
Con mirada hacia el futuro, las siguientes fases del proyecto contemplan un análisis exhaustivo de la biodiversidad presente en la laguna. Se prevé realizar un diagnóstico completo de la calidad del agua, que medirá parámetros como el pH y el oxígeno disuelto, e identificará tanto especies nativas como exóticas en la zona. Esta evaluación permitirá conocer el impacto de las actividades humanas y establecer prioridades de intervención, en un esfuerzo conjunto entre las distintas facultades de la universidad, como Ciencias Biológicas y Ciencias Químicas.
El proyecto culminará con un plan de conservación a largo plazo que no solo implicará un mantenimiento constante de la laguna y sus espacios verdes, sino que también buscará involucrar a la comunidad universitaria y a los ciudadanos locales en acciones de cuidado y protección. Con la adición de infraestructura mejorada, como más luminarias y bancos renovados, este proyecto representa un importante esfuerzo colectivo para conservar un importante ecosistema en el epicentro de la BUAP, donde ciencia, educación y participación comunitaria se unen para hacer frente a los actuales desafíos ambientales.