Para suerte de muchos, en la actualidad y gracias a la estable economía del país es muy factible cubrir los gastos de compra de una propiedad con la ayuda financiera que ofrecen los créditos hipotecarios.
Si bien a nadie le gusta endeudarse, hay que aceptar que ahorrar lo suficiente para comprar una vivienda justa y acorde a los intereses de la sociedad actual podría tomar años en los cuales posiblemente aumenten los valores, por eso la opción del crédito es bastante conveniente dentro del mercado inmobiliario.
Consultamos con el experto de este rubro, Enzo Langer y comenta que «Optar por un crédito hipotecario no es trabajo fácil y aquí es donde entra en juego todo el esfuerzo realizado junto con un plan de ahorro ejecutado a lo largo de tu vida laboral. Primero que todo, se debe elegir la opción que sea más adecuada y que se adapte a las necesidades del comprador, pues existen diversos tipos de créditos».
Se sabe que, como todos, la búsqueda de un crédito hipotecario se basa en encontrar la alternativa con la tasa de interés más baja y te permita ahorrarte mucho dinero, pero en verdad son muchos factores lo que debes considerar al momento de elegir tu crédito y va mucho más allá de la tasa de interés.
Puede dar lo mismo si es baja o alta cuando están presente otros elementos como la capital inicial, intereses personales, plazos y más. Por lo que cada opción debe ser analizada detalladamente así será posible acceder a la que mejor se acomode a tus necesidades.
Ahora bien, antes de tomar cualquier decisión, el experto aconseja que es necesario orientarse un poco más en el tema. Parte conociendo y evaluando los tipos de tasa de interés que existen, son 3 y aquí te los presentamos.
Tipos de tasa de créditos
- Tasa fija: no varía en el tiempo, por lo que se mantiene igual en el tiempo que dura el crédito solicitado.
- Tasa variable: está en constante cambio. Varía de acuerdo con la tasa preferencial del mercado o la tasa de índice.
- Tasa mixta: empieza fija y luego de un tiempo establecido comienza a variar según la tasa preferencia del mercado o la tasa de índice.
Otro factor que el especialista Enzo Langer comenta que debes considerar antes de solicitar tu crédito hipotecario, es el tipo de crédito que se acomoda mejor a tus intereses y necesidades. Evalúa cada uno y estudia cuál es la mejor alternativa para ti.
Tipos de créditos hipotecarios
- Crédito hipotecario con letras de créditos: se financia con un instrumento que emite el banco llamado “letras hipotecarias” y estas pueden ser transadas por el banco en la bolsa de valores o ser adquiridas por un tercero que financia finalmente al deudor. El precio obtenido por la venta de estas letras varía de acuerdo a las condiciones del mercado por lo que se pueden generar diferencias favorables o no favorables.
- Mutuo hipotecario endosable: significa que el banco puede transferir la deuda a otro banco o institución financiera. Esta es una de las opciones más acertadas para quienes desean comprar una vivienda con crédito.
- Mutuo hipotecario no endosable: en este caso el banco financia el préstamo con recursos propios, pero no puede ser transferido a otros bancos.
Ahora, los requisitos básicos para solicitar un crédito hipotecario pueden variar dependiendo de la empresa, pero usualmente encontramos los siguientes:
- Documento de identidad.
- Comprobante de servicio a tu nombre.
- Dependiendo del estado civil: libreta de matrimonio, acta de divorcio o acta de convivencia.
- Certificado de nacimiento de los hijos (en caso de que los hubiere)
- Últimas 3 liquidaciones de sueldo y certificado de empleo en caso de ser dependiente.
- Última declaración de impuestos y régimen de ganancias notariado en caso de ser independiente.
Y por último pero no menos importante, recuerda comparar la Carga Anual Equivalente (CAE) de cada financiamiento. Esta cifra engloba todos los gastos incluidos en un crédito.