Un reciente estudio de la fundación TECHO-Chile reveló que el 40% de los campamentos en el país están ubicados en terrenos donde es posible construir viviendas. Este hallazgo abre una oportunidad clave para abordar la crisis habitacional, permitiendo que miles de familias accedan a soluciones habitacionales definitivas sin necesidad de ser desplazadas.
Un problema en aumento
El informe de TECHO-Chile destaca que el número de campamentos ha crecido de manera sostenida en los últimos años, reflejando el impacto del déficit habitacional y la falta de acceso a viviendas dignas. Actualmente, más de 1.300 campamentos albergan a familias que viven en condiciones precarias, muchas de ellas sin acceso a servicios básicos como agua potable, electricidad y alcantarillado.
Uno de los puntos más relevantes del estudio es que 4 de cada 10 campamentos se encuentran en terrenos urbanizables, lo que significa que podrían ser incorporados en planes de regularización y desarrollo habitacional sin la necesidad de reubicaciones forzadas.
Oportunidad para políticas públicas
Este hallazgo plantea un desafío, pero también una oportunidad para el Estado y las autoridades locales. Según TECHO-Chile, si se implementan planes adecuados de urbanización y regularización, muchas familias podrían acceder a soluciones habitacionales sin ser desplazadas de sus comunidades actuales.
El estudio sugiere que las políticas públicas deberían enfocarse en:
- Regularización y urbanización de campamentos ubicados en terrenos aptos para viviendas.
- Aceleración de proyectos habitacionales en zonas con déficit de viviendas sociales.
- Mayor inversión en infraestructura para mejorar la calidad de vida de quienes habitan en campamentos.
Una crisis que requiere soluciones urgentes
El aumento de campamentos en Chile refleja una crisis habitacional que sigue en crecimiento. La posibilidad de desarrollar viviendas en los terrenos ya ocupados por algunas de estas comunidades representa una alternativa viable para enfrentar el problema sin recurrir a desalojos masivos.
Sin embargo, para que esta solución sea efectiva, se requiere voluntad política, inversión y planificación estratégica que garantice viviendas dignas y acceso a servicios básicos para miles de familias en situación de vulnerabilidad.