El mercado de apuestas en línea en nuestro país ha experimentado un crecimiento sin precedentes, alcanzando la sorprendente cifra de US$3.100 millones en ingresos brutos durante el año 2024. Esta información, revelada por un informe de la consultora Yield Sec, destaca el hecho de que alrededor de 5,4 millones de usuarios activos han participado en esta industria emergente, superando las proyecciones iniciales del Estado. La magnitud de estos números parece señalar la necesidad urgente de una regulación eficaz que permita no solo regular el mercado, sino también aprovechar su potencial económico para el beneficio de la nación.
Según el estudio, una regulación correctamente diseñada podría generar entre US$600 y US$800 millones cada año en impuestos, cifras que asombran y que contrastan dramáticamente con las estimaciones iniciales del Ministerio de Hacienda, que tan solo proyectó ingresos de US$50 millones. Carlos Baeza, representante de la Agrupación de Plataformas de Apuestas en Línea, enfatizó que este informe revela la existencia de un sector que no puede ser ignorado y que requiere urgentemente un marco legal que lo gobierne. Aseguró que este mercado no es marginal, sino parte de una industria consolidada que debe ser reconocida y regulada cuanto antes.
Baeza también hizo hincapié en el hecho de que, en un contexto fiscal complicado, una regulación adecuada del juego online podría permitir la financiación sostenible de políticas públicas. La posibilidad de llegar a una recaudación impositiva de hasta US$1.000 millones anuales destaca la importancia de establecer un sistema que beneficie tanto al Estado como a los operadores legítimos. Estos recursos podrían destinarse a áreas críticas como la educación y la salud, aportando así al desarrollo social y sustentable del país.
No obstante, el proyecto actualmente debatido en el Congreso presenta una carga tributaria del 37,6%, considerablemente superior al promedio internacional del 22%. Esto ha generado preocupaciones, ya que, según Yield Sec, esta política fiscal podría tener efectos adversos sobre el sector. Ismail Vali, fundador y CEO de la consultora, advirtió que regulaciones mal diseñadas y altos impuestos tienden a favorecer la proliferación de operadores ilegales que podrían desestabilizar el mercado. Esto podría dar lugar a una dualidad de ofertas: una legal y tributada, y otra criminal y no regulada, lo que resultaría en un escenario contraproducente para todos los involucrados.
La urgencia de regular el mercado de apuestas online en el país no es solo una cuestión de recaudación fiscal, sino también una necesidad de garantizar la seguridad y transparencia de las operaciones en un sector que sigue creciendo. La regulación adecuada podría asegurar que los usuarios tengan acceso a plataformas confiables y seguras, mientras que el Estado podría beneficiarse de una fuente de ingresos significativa que apoye el bienestar social. A medida que la discusión avanza en el Congreso, la necesidad de un enfoque equilibrado que promueva tanto la competitividad como la legalidad se vuelve más crucial que nunca.