Como ya se ha visto con anterioridad, la economía reacciona para bien o para mal cada vez que se actualizan las noticias sobre el coronavirus. Lamentablemente, una nueva variante del microorganismo detectada en Reino Unido, ha provocado caídas de varios índices y monedas a nivel global. No obstante, se prevé que las consecuencias nos sean tan catastróficas como a principio de año.
El coronavirus, en términos económicos ha significado una de las más grandes crisis que se hayan vivido en la historia, casi equiparable con la de 1929. A inicios de este año, fueron varios índices bursátiles, monedas y materias primas las que descendieron fuertemente su valor. Con el tiempo se han ido recuperando lentamente, pero ante cada nueva mala noticia vuelven a caer.
Así ha sido el caso en diciembre de este año, cuando se dio a conocer ante el mundo una nueva cepa del virus generada naturalmente en Reino Unido. Esta “evolución” del COVID-19, según afirman los estudios preliminares, resulta ser muchos más contagiosa que la primera variante, pero al parecer sería menos dañina a nivel de salud.
Con esta noticia, los mercados internacionales reaccionaron cayendo de manera generalizada, por lo que muchos ya llaman a retirar las utilidades para evitar mayores pérdidas.
Las primeras consecuencias
Tras el conocimiento de la situación, los primeros coletazos se sintieron fuerte en Londres y en Europa. El Financial Times Stock Exchange (FTSE), valor bursátil referencial de la Bolsa de Valores de la capital británica, retrocedió en un 1,73%. A esto le siguieron con caídas mayores al 2% las bolsas de París, Milán y Frankfurt. Todo esto se tradujo en que el Euro Stoxx 50, índice que representa a las 50 empresas más grandes de Europa, cayera en un 2,74%.
Con caídas menores, Wall Street también vivió una jornada algo menos amarga. Esto porque el S&P 500, reconocido por ser uno de los índices mas representativos de la economía norteamericana, se redujo en un 0,4. Por otro lado, el Nasdaq solo cayó en un 0,1%. El único que no descendió fue el Dow Jones, que cerró la jornada con un alza del 0,12%.
Sin embargo, las voces expertas señalan que no hay que perder la cabeza. La caída sufrida tras el conocimiento de la nueva cepa no se compara a las sufridas a inicio de año. El factor que más calma a los inversionistas es que ya hay varias vacunas listas para ser implementadas, las cuales tendrían la misma efectividad frente a la nueva cepa y las que podrían surgir a futuro.
¿Qué sucedió en Chile?
Al igual que en el resto del mundo, los efectos de la aparición de esta nueva cepa no tardaron en llegar. Durante la primea jornada tras el conocimiento de lo sucedido, el Índice de Precio Selectivo de Acciones (IPSA), principal referente de la bolsa de valores nacional, disminuyó en un 1,13%.
La empresa que más perdidas generó fue Latam Airlines, quien vio como sus acciones cayeron en un 10,39%. Otras empresas también sufrieron caídas, como Hites (-3,53), Falabella (-2.98), Enel Américas (-2,66%), Santander (-2,2%), Cencosud (-1,64%), Cencoshopp (-1,42%), Parque Arauco (-1,09%), Ripley (-0,92%) y Tricot (-0,52%).
No obstante, en Chile también hay que considerar que las cifras de casos positivos diarios de coronavirus han ido en aumento, por lo que el temor se ha hecho presente en el mercado. Un eventual cierre del comercio y una vuelta a las cuarentenas totales causaría graves pérdidas a sectores tan afectados como el comercio.
Aunque otra razón que explica las grandes bajas que se experimentaron en nuestro país, estaría ligada a la toma de utilidades que podría hacer ocurrido en este periodo. Varios de los inversionistas, al verse atemorizados por las nuevas caídas, han preferido retirar sus activos ahora y no después cuando el momento pueda empeorar.
Lo que pasa con el dólar, el cobre y el petróleo
El que no ha sufrido grandes disminuciones es el dólar norteamericano, que durante este último tiempo ha experimentado una lenta recuperación. Aún ante el conocimiento del nuevo coronavirus de Reino Unido, el precio del dólar en chile en una primera instancia subió $10, llegando a los $737. No obstante, luego se estabilizó y quedó en $729.
En cuanto al cobre, principal producto de exportación chileno, registró una caída de un 1,58%, llegando a un precio de 3,555 dólares en la Bolsa de Metales de Londres. Sin embargo, el petróleo fue la materia prima que sufrió más en la bolsa, ya que el WTI cedió en un 2,77% y el Brent en un 2,62%.
Esto último se explica gracias al temor que tienen los inversionistas ante un posible cese de actividades industriales, lo que provocaría una baja en la demanda de petróleo a nivel global. A pesar de todo, se espera que las nuevas cepas que puedan generarse no provoquen el mismo caos inicial. Hoy por hoy la situación está mucho mas controlada.